El Supremo italiano condena a Alemania a indemnizar a las víctimas del nazismo

El tribunal niega la inmunidad jurisdiccional al estado alemán y le otorga, por primera vez, responsabilidad civil en un caso relacionado con la II Guerra Mundial

Ésta es la noticia que ha publicado hoy la Cadena Ser. Parece ser que en los tiempos que corren, van perdiendo fuerza todos aquellos actos que impliquen la devastadora fuerza de las dictaduras y los totalitarios. Parece ser, que hay gente que necesita juzgar aquello que toda la humanidad rechaza: el abuso de poder, los crímenes de guerra y las injusticas cometidas.

Hago referencia a esta noticia, en parte, por hablar de "Garzón". Muchos piensan y erróneamente comentan que los crímenes cometidos en una guerra deben olvidarse, pues tanto fueron malos unos como otros. Olvidar es una palabra que no me gusta, ¿porqué? Por la sencilla razón que lo que somos hoy, viene condicionado por nuestra historia de ayer y que nuestros avances como ciudadanos y personas dependen de todos los movimientos históricos que han dado lugar a lo que hoy tenemos. Eso no implica la necesidad de renovarse, de seguir luchando y de intentar cambiar aquello que no creamos justo.

"Cinéfilas" es un grupo de personas que aboga por la libertad. ¿Qué libertad puede tener un país que tras la Guerra Civil, el gobierno que se instauró en el poder cometió miles y miles de asesinatos y que en 1977, cuando vieron llegar la democracia, crearon una ley de Amnistia para no ser juzgados? ¿por miedo? ¿por verguenza? ¿porque hay quienes se creen con el derecho de hacer todo lo que quieran y nadie tiene el poder de juzgarlos?

Lo que propone Garzón no es dividir a España, no es abrir nuevas heridas. Es pedir justicia y evitar que se olvide que hubo una vez una España donde el odio terminó con muchísimos españoles.